¿Cuáles son estas reflexiones?
Los hombres más jóvenes son quienes más rechazan la promoción de la igualdad.
Más de la mitad de los hombres de entre 16 y 24 años (51,8%) considera que “se ha llegado tan lejos en la promoción de la igualdad de las mujeres que ahora se está discriminado a los hombres”. Este es el porcentaje más elevado de los distintos rangos de edad, lo que rompe con la idea de que las generaciones más jóvenes están más concienciadas y es menos necesario trabajar en su sensibilización en materia de igualdad.
Si bien los datos indican que los hombres en edades más jóvenes son quienes ven en mayor medida la promoción de la igualdad como una amenaza, no ocurre así en el caso de las mujeres. De hecho, las mujeres más jóvenes son las que rechazan esta idea en mayor medida (únicamente el 27,7% de ellas está de acuerdo con tal afirmación).
El porcentaje total de los hombres que se muestran de acuerdo con esta afirmación es también muy elevado, alcanzando el 44,1%. En el caso de las mujeres, el porcentaje se reduce al 32,5%, habiendo casi 12 puntos porcentuales de diferencia.
A pesar de que estos datos nos indican que quedan muchos mitos que romper en torno a las políticas y acciones para fomentar la igualdad entre mujeres y hombres, también deja claro que la mayoría de la sociedad no está de acuerdo con que el fomento de la igualdad entre los sexos suponga una discriminación hacia los varones.
A vueltas con la corresponsabilidad.
Los datos de la encuesta también indican que sigue habiendo un desequilibrio significativo en el reparto de las tareas domésticas y de cuidados debido a la falta de corresponsabilidad de los hombres.
En un día laborable, las mujeres ocupan 172 minutos (casi 3 horas) de media a las tareas del hogar (limpiar, cocinar, compra…) y ellos 126,76 minutos (2 horas). Al preguntar por el cuidado de la descendencia durante un día laborable la distancia entre ambos sexos aumenta: mientras las mujeres dedican 412,25 minutos (6,7 horas), ellos ocupan unos 228,88 minutos (3,7 horas).
A pesar de estos datos que evidencian la falta de corresponsabilidad y el desigual reparto de las tareas y responsabilidades de cuidado, la percepción de los varones se aleja de esto, ya que sólo el 58,5% de ellos considera que son las mujeres las más perjudicadas en este aspecto.
Trabajar para fomentar la corresponsabilidad sigue siendo necesario si queremos avanzar hacia modelos de vida más conciliadores entre trabajo y vida y avanzar hacia la igualdad real entre mujeres y hombres el mercado laboral.
Mucho por hacer.
Estos datos muestran que lejos de la falsa creencia de que las nuevas generaciones están más concienciadas con la necesidad de fomentar la igualdad entre mujeres y hombres, es urgente dedicar recursos de calidad a seguir implantando la coeduación en todas las etapas educativas para evitar un retroceso en las actitudes machistas y una actitud de rechazo hacia la igualdad.
La formación y sensibilización en igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en todas las edades es vital para atajar estos datos que muestran que los chicos y hombres más jóvenes están creciendo rechazando al feminismo y entendiéndolo como una amenaza.
Sin acciones de sensibilización, formación y pedagogía por parte de personal experto con formación específica en igualdad entre mujeres y hombres (coeducadoras formadas, consultoras, agentes y promotoras de igualdad) que acompañen a las políticas y medidas de igualdad, seguirá alimentándose este rechazo, aumentando las relaciones de desigualdad entre los sexos y los años que nos quedan para lograr sociedades con igualdad real entre mujeres y hombres.
El papel de las empresas.
Las empresas juegan un papel crucial en el avance hacia la igualdad real entre mujeres y hombres y ya disponen de herramientas eficaces para fomentarla en sus centros de trabajo. Los planes de igualdad son el marco ideal desde el que impulsar diferentes medidas que ayuden a seguir avanzando:
- Sensibilización en materia de igualdad para romper mitos sobre las políticas de igualdad y el feminismo.
- Sensibilización para fomentar la corresponsabilidad y favorecer la conciliación.
- Implantar medidas que faciliten la conciliación entre la vida laboral, familiar y personal y evitar que las responsabilidades de cuidado supongan una desventaja o desigualdad en el acceso, mantenimiento o promoción en el empleo.
- Desarrollar medidas de acción positiva para corregir situaciones de desigualdad que se dan en la empresa.
- Implementar protocolos de acoso sexual y acoso por razón de sexo y medidas preventivas que garanticen la salud y seguridad en el trabajo.
- Capacitar al personal de recursos humanos e incorporar figuras con formación específica en materia de igualdad entre mujeres y hombres para impulsar, dirigir y asesorar en la implantación, seguimiento y evaluación de las medidas de los planes de igualdad.
Desde Criteria, te asesoramos y acompañamos para seguir avanzando hacia entornos y plantillas más igualitarias y romper los sesgos sexistas que aún existen.
*Fuente original de datos: CIS, 2024. es3428mar_HyM_A (cis.es)
