Compromiso con la igualdad
Alcanzar la igualdad de género es una de las tareas fundamentales que las sociedades tienen, pues existe una clara desigualdad de oportunidades y de trato entre mujeres y hombres. Desde las Naciones Unidas (ONU), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la Unión Europea (UE), la Unión Africana (UA) y un largo etcétera de organizaciones intergubernamentales y nacionales, todas ellas están comprometidas por alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres. Sin embargo, lograr ese objetivo pasa por llevar a cabo políticas en todos los ámbitos e involucrar a todos los agentes sociales: la escuela, el mundo laboral, la prensa y el entretenimiento, la política, etc.
En lo que respecta al mundo laboral, alcanzar la igualdad de género pasaría por acabar con la infrarrepresentación femenina, la desigualdad salarial, el techo de cristal, el acoso sexual, y todo aquello que suponga la vulneración de los derechos de las mujeres en su puesto de trabajo. Para conseguir la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres las empresas deben dar un primer paso: demostrar su real compromiso con la igualdad. Ahora bien, ¿cómo se puede materializar este compromiso?
Aunque a priori pueda parecer una cuestión menor, es indispensable que las empresas crean en la igualdad de género, pues es un valor en sí mismo que aporta un beneficio a las empresas, sobre todo para aquellas empresas que se ubican en países donde éstas no están obligadas a realizar acciones en materia de igualdad, como es el caso de México.
Además, toda medida que se lleve a cabo para ponerle fin a las desigualdades pasa por realizar transformaciones estructurales de la propia empresa. Es primordial que las empresas sean conscientes de que deben ir más allá y de cuál es su labor para con la sociedad.
Cuando hablamos de acabar con las desigualdades nos referimos a llevar a cabo acciones concretas que acaben con problemáticas concretas:
La primera de ellas es la manifestación del compromiso. El compromiso se debe declarar a través de un documento donde se recoja la igualdad como un valor en sí mismo y un principio básico y transversal para la empresa. Será la dirección quien desarrolle este documento y lo comunique a la plantilla. Con este primer paso, la empresa plasma sus intenciones para garantizar una mejora en las condiciones laborales entre mujeres y hombres con hechos concretos. ¿A qué hechos concretos nos referimos?
Un claro ejemplo son las medidas que se pueden desarrollar en la selección de nuevos perfiles. En los procesos de selección y contratación revisar la política que se lleve a cabo, garantizando que no existan sesgos en los que se tienda a descartar las candidaturas de mujeres, sería una medida concreta que garantice, a priori, la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres a la hora de acceder a un nuevo puesto de trabajo.
Otro ejemplo es cómo atajar la prevención ante el acoso sexual y por razón de sexo. La empresa puede desarrollar mecanismos de prevención y actuación como protocolos y ofrecer a la plantilla capacitaciones enfocadas a la sensibilización de estas cuestiones. Estos ejemplos son extrapolables al resto de cuestiones estructurales como: la infrarrepresentación femenina, la conciliación y corresponsabilidad, la promoción profesional, la clasificación profesional, la capacitación, la igualdad salarial, y demás cuestiones.
Por otra parte, es vital que las empresas que tengan este compromiso con la igualdad se erijan como referentes para aquellas que aún no hayan dado el paso. Con ello nos referimos a que es imprescindible que se comunique externamente todos los avances en materia de igualdad, que la empresa se interese por hacer partenariados con aquellas empresas que también tengan este compromiso, así como asociaciones y/u ONGs que promuevan la igualdad, pues es la mejor manera de trasmitir esta idea a todo el mundo de la empresa.
Además de la comunicación externa, la empresa debe preocuparse por realizar comunicaciones internas sobre los avances que se estén desarrollando en la empresa. Es decir, toda nueva política deberá comunicarse a la plantilla y evaluar su aplicación para sí, se está por el camino correcto, continuar desarrollando medidas acordes a las planeadas.
Si tienes un gran compromiso con la Igualdad y te gustaría poder materializarlo en tu empresa, no dudes en ponerte en contacto con Criteria RRHH. Contamos con una amplia experiencia acompañando a empresas a implementar estas medidas y que la transformación sea lo más satisfactoria posible. ¡No dudes en empezar con ello!