Corresponsabilidad y conciliación
Según el informe Sistemas de información: transformar datos en información, información en conocimiento y conocimiento en decisión política publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en febrero de 2021, las mujeres destinan 2/3 de su tiempo al trabajo no remunerado y 1/3 al trabajo remunerado, mientras que los hombres distribuyen su tiempo en relación contraria. Es por ello por lo que las mujeres vienen cargando y cargan aún en la actualidad sobre sus espaldas todo el peso del cuidado del hogar y las familias. Tras la incorporación de las mujeres al mundo laboral, esta carga solo ha hecho que crecer al sumarse la carga de trabajo “fuera de casa”.
El adjetivo “superwoman” se ha utilizado en numerosas ocasiones de forma positiva para asemejar a las mujeres del mundo real con las superheroínas del cine al sacar adelante todo el trabajo fuera y dentro del hogar y llegando a todo lo que humanamente parecería imposible. Sin embargo, esconde tras de si un silencio colectivo en el que se sigue cronificando el problema de atribuirle a las mujeres el trabajo del hogar como suyo propio. Tras detectar esta enorme problemática, se empezaron a implementar medidas de conciliación familiar y laboral en las empresas bajo las directrices de organismos internacionales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT). ¿Qué entendemos por conciliación familiar y laboral?
La conciliación familiar y laboral se trata del equilibrio que una persona debe encontrar entre sus responsabilidades laborales y familiares, asegurando que ambas esferas reciban la atención y el tiempo que merecen. Ahí las empresas deben ofrecer una serie de medidas para mejorar la conciliación de la plantilla. A continuación, una lista de ejemplos de medidas que fomentan la conciliación más allá de lo que estipula la normativa laboral de los diferentes países:
- Permitir horarios de trabajo flexibles o la opción de trabajo remoto (teletrabajo), sin que ello penalice a quienes hacen uso de los mismos.
- Permisos no retribuidos más allá de lo establecido legalmente. Acomodar las vacaciones laborales a las vacaciones escolares.
- Formación online o en horario de trabajo.
- Encuesta a la plantilla para conocer sus necesidades formativas.
Como es evidente, la conciliación es fundamental para que las personas puedan compaginar su vida personal y familiar con su desempeño en el trabajo. Ahora bien, la conciliación debe ir de la mano de la corresponsabilidad ya que, si sólo se pone el foco en la conciliación, se acabará por perpetuar los estereotipos de género. Estos estereotipos continuarán presionando a las mujeres, pues seguirán cargando con la mayor parte del trabajo en el hogar penalizando sus carreras profesionales porque, aunque puedan ir más aliviadas al incorporar medidas de conciliación en la empresa, se seguirá pensando que las principales responsables del desarrollo de esas tareas son ellas. Ahora bien, ¿qué se entiende por corresponsabilidad?
La corresponsabilidad se trata de la distribución equitativa, equilibrada y funcional de las responsabilidades personales, familiares y laborales. Esto implica planificar, organizar y realizar de forma equitativa las tareas domésticas, cuidar de las personas a cargo (hijos/as o personas dependientes) y del trabajo remunerado, así como compartir la carga mental de todo ello.
De igual modo, para que la corresponsabilidad se pueda llevar a cabo es necesaria una comunicación clara entre las partes, determinando quién hará qué en todos los aspectos. Es decir, no sólo se trata de hacer la comida o limpiar la casa, sino también implica planear quién se encargará de las diferentes responsabilidades siendo todas las personas del hogar partícipes en esta organización. Es decir, no se trata de “ayudar” con las tareas del hogar, sino que todas las personas del núcleo familiar se sientan parte del cuidado del mismo.
Como se puede observar, la falta de medidas de corresponsabilidad puede, por tanto, cronificar el problema de tal manera que las mujeres sigan haciendo malabares para compaginar todos los ámbitos de sus vidas. Las empresas, desde su posición también pueden llevar a cabo medidas que garanticen una corresponsabilidad de mujeres y hombres equitativa, pero ¿qué medidas concretas se pueden llevar a cabo?:
- Formación o sensibilización en igualdad a toda la plantilla, haciendo hincapié en la participación de los hombres en la misma.
- Detección de las necesidades de conciliación de la plantilla a través de una encuesta desagregando por sexos. De esta manera, se puede saber qué hombres y qué mujeres hacen uso de ellas y promocionarlas en mayor medida.
- Facilitar servicios que aligeren la carga extralaboral como, por ejemplo, los seguros de salud, servicios de guardería, comedor, etc.
- Equiparación de un mínimo de días por baja de paternidad y maternidad, de manera que éstos sean intransferibles.
Todas estas medidas deben ir de la mano de una buena comunicación a la plantilla para que conozcan esa materialización del compromiso de la empresa con la igualdad entre mujeres y hombres y la promoción de la conciliación y corresponsabilidad de su plantilla.
Desde Criteria RRHH acompañamos a empresas a hacer real y efectiva la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en la empresa con el acompañamiento en la incorporación de medidas concretas de conciliación, corresponsabilidad y cualquier otro eje estructural. ¡No dudes en contactarnos si quieres seguir este camino por la igualdad!