Primera Norma ISO de igualdad de género
Se publica la primera norma ISO de igualdad de género en las organizaciones
La nueva ISO 53800 proporciona directrices para que las empresas promuevan e implanten la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.
Su objetivo es superar las desigualdades y la discriminación derivadas de los roles de género en diversos ámbitos, incluido el laboral, y fomentar una cultura de igualdad que beneficie a la sociedad y contribuya a un desarrollo sostenible y centrado en las personas.
La norma es aplicable a todas las organizaciones (públicas o privadas) independientemente de su tamaño, ubicación o ámbito de actividad.
¿Qué beneficios tiene para las empresas cumplir con la ISO de igualdad?
- Promueve la comprensión global y la implantación de la igualdad de género.
- Respalda la creación de culturas inclusivas y equitativas en las organizaciones.
- Fomenta la igualdad de género como cuestión fundamental de derechos humanos.
- Ayuda a las organizaciones a cumplir las obligaciones legales en materia de igualdad de género
¿Qué deben hacer las empresas para cumplir con la ISO de igualdad?
Las organizaciones deberán llevar a cabo una recopilación de datos y un análisis cualitativo y cuantitativo de forma anual dirigido a identificar sus grupos de interés internos y externos, seleccionando sus prioridades y las cuestiones que tienen más impacto, positivo o negativo, en su actividad, en sus grupos de interés y en la igualdad de género.
De esta forma, se identificarán sus prioridades estratégicas, que deberán abordarse teniendo en cuenta las siguientes materias:
- Educación y acceso a la formación.
- Salud sexual y reproductiva y derechos asociados.
- Prevención y extinción de la violencia contra mujeres y niñas.
- Derechos de mujeres y niñas previniendo y combatiendo toda forma de discriminación.
- Empoderamiento económico y participación en la vida pública de las mujeres.
Por ello, para detectarlas se realizará un análisis de la dimensión interna de la organización, la actividad e inversiones de esta, las relaciones externas, y la comunicación que tiene tanto interna como externa.
Las empresas deberán establecer y desarrollar un mecanismo de reclamación para prevenir detectar y responder a la violencia de género (VG), en la que se incluye la explotación, el abuso y el acoso sexuales (SEAH), tanto internamente como en la relación con partes interesadas externas, cuyas directrices se establecen en la norma ISO.
En este análisis se tomarán como referencia una serie de indicadores para establecer la comparación entre hombres y mujeres, tales como, las condiciones generales de empleo, la remuneración, la formación, las condiciones de trabajo, las vacaciones, la organización del tiempo de trabajo en la empresa, y el acoso sexual.
De este análisis, resultará un plan de mejora que deberá revisarse de forma anual.
Para llevar a cabo este proceso, la norma proporciona sugerencias de actuación y buenas prácticas para las organizaciones. Estas buenas prácticas se desarrollan en diferentes materias tales como la implicación de hombres y niños en la lucha por la igualdad, comunicación interna y externa, ofertas de empleo sólo para mujeres, instalación de salas de lactancia, aseos, menstruación y pobreza menstrual, los efectos de la violencia doméstica de género, etc.
Asimismo, establece ejemplos y sugerencias de aplicación y seguimiento de un plan estratégico, un posible índice de igualdad profesional nacional, buenas prácticas en el trabajo a distancia, programas de formación en igualdad, registro salarial de la organización, aplicar una política organizativa contra el acoso sexual y la discriminación de género.
Desde Criteria te acompañamos en la creación e implantación de medidas que fomenten la conciliación y la corresponsabilidad en tu empresa, dentro de una política de conciliación que favorezca la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, mejorando las condiciones de trabajo, el ambiente laboral, la productividad y la imagen de la compañía.