Los planes de igualdad se han convertido en una herramienta esencial para fomentar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres el ámbito laboral, eliminando cualquier tipo de discriminación por razón de sexo.
En este artículo, abordamos en detalle qué es un plan de igualdad, cuándo es obligatoria su elaboración, qué empresas deben implementarlo, así como los beneficios y sanciones asociados con el cumplimiento normativo. También exploramos cómo elaborar un plan de igualdad y las medidas que deben adoptarse para garantizar que su implementación sea efectiva.
¿Qué es un Plan de igualdad?
Un plan de igualdad es un conjunto ordenado de medidas adoptadas después de realizar un diagnóstico de situación, tendentes a alcanzar en la empresa la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres y a eliminar la discriminación por razón de sexo.
Estos planes tienen como objetivo eliminar cualquier tipo de discriminación y fomentar la igualdad en las condiciones de trabajo, la retribución, la contratación, la formación y la promoción, entre otras, dentro de las empresas, así como prevenir y actuar frente al acoso sexual o por razón de sexo.
El plan de igualdad debe ser un documento formal que describa las políticas y medidas concretas que una empresa llevará a cabo para garantizar la igualdad de trato y de oportunidades entre hombres y mujeres. Además, debe ser revisado periódicamente para adaptarse a los cambios en las normativas laborales y las necesidades de la empresa.
¿Cuándo es obligatorio establecer un Plan de Igualdad en tu empresa?
La obligatoriedad de un plan de igualdad varía según el tamaño de la empresa y su sector de actividad. Actualmente, la normativa establece que todas las empresas con 50 personas trabajadoras en plantilla deberán contar con un plan de igualdad obligatorio.
Obligación establecida por el convenio colectivo
En algunos casos, los convenios colectivos del sector o de la empresa incluyen la obligación de establecer un plan de igualdad, independientemente del tamaño de la plantilla. Estos convenios buscan asegurar que se cumpla la igualdad de género a nivel sectorial y en cada una de las empresas en las que aplican.
Si el convenio colectivo establece que las empresas del sector deben contar con un plan de igualdad, todas las empresas adheridas a ese convenio colectivo deberán implementarlo, incluso si no alcanzan el umbral de las 50 personas trabajadoras.
Obligación del Plan de Igualdad establecida por el número de personas en plantilla
Las empresas con más de 50 personas trabajadoras (enlazar con art obligatoriedad plan igualdad) estarán obligadas a negociar, diseñar y registrar un plan de igualdad. Este umbral de personas trabajadoras es un criterio clave para determinar la obligatoriedad de este plan, y todas las empresas que superen este número deben cumplir con la normativa, pudiendo enfrentarse a sanciones en caso de no disponer del mismo.
Obligación establecida por la autoridad laboral
Las autoridades laborales tienen la potestad de imponer la obligatoriedad de un plan de igualdad en las empresas, independientemente del tamaño de su plantilla, si se determina que existe una situación de discriminación o desigualdad por razón de sexo dentro de la empresa. Además, la inspección laboral puede requerir la implementación de un plan de igualdad en caso de que se detecten problemas relacionados con la igualdad entre mujeres y hombres en el marco de una inspección de trabajo.
Requerimiento para optar a subvenciones y concursos públicos
Para acceder a subvenciones, licitaciones y concursos públicos, las empresas deben demostrar que cumplen con los requisitos legales en materia de igualdad, lo que hace que el Plan de Igualdad sea indispensable.
Las administraciones públicas exigen que las empresas que deseen acceder a financiación gubernamental o participar en contratos con entidades estatales cuenten con un Plan de Igualdad registrado. De no cumplir con este requisito, la empresa puede ser excluida automáticamente de estos procesos, lo que supone una gran desventaja competitiva.
Además, cada vez es más frecuente que organismos privados incluyan entre sus criterios de selección la existencia de un Plan de Igualdad efectivo. Esto significa que, incluso fuera del ámbito de lo público, las compañías que no implementen estas políticas pueden ver limitada su capacidad para obtener nuevas oportunidades de negocio.
Beneficios de implantar un Plan de Igualdad en tu empresa
Implantar un plan de igualdad en una empresa no solo es una obligación legal, sino que también aporta múltiples beneficios tanto para la organización como para la plantilla. Entre los principales beneficios se incluyen:
Mejora del clima laboral
La implantación de medidas destinadas a la promoción de la igualdad beneficiosas para las personas trabajadoras va a permitir disponer de una plantilla más motivada y comprometida con la organización, potenciándose así su rendimiento y la calidad de su trabajo.
Reducción del absentismo
Se ha demostrado también la incidencia directa de las medidas de promoción de la igualdad, especialmente las acciones de conciliación, con la reducción del absentismo laboral, ya que las personas trabajadoras cuentan con más flexibilidad y posibilidades a la hora de gestionar su jornada y tiempo de trabajo.
Atracción y retención del talento
Disponer de una plantilla feliz y satisfecha con sus condiciones de trabajo va a influir directamente en su voluntad de permanecer en la empresa. Este hecho permite, por lo tanto, conseguir la retención y aprovechamiento del talento en la organización, consiguiéndose la fidelización del personal clave e idóneo.
Por otro lado, el Plan de Igualdad permite poner en conocimiento de personas externas a la organización las buenas prácticas que se realizan en la misma, lo que facilita la atracción del talento.
Aumento de la productividad
La mejora de la conciliación de las personas trabajadoras aporta ventajas a la organización, puesto que la plantilla cuenta con mayor flexibilidad para atender su vida personal y familiar lo que repercute en una reducción del estrés, haciendo que aumente su rendimiento y, con ello, la productividad de la empresa.
Mejora de la reputación empresarial:
La difusión del Plan de Igualdad y las medidas propuestas en el mismo, permiten a la organización darse a conocer tanto en su sector como en su territorio y, actualmente, con el uso de las nuevas tecnologías, en muchos otros ámbitos y lugares.
Esto, va a permitir que la entidad mejore su imagen de cara a su clientela y a la sociedad en general, al ofrecer un elemento diferenciador, hecho que supone contar con una ventaja competitiva.
Medidas para elaborar un Plan de igualdad
El plan de igualdad debe contener una serie de medidas concretas y específicas que garanticen la igualdad de trato y de oportunidades entre hombres y mujeres. Algunas de las medidas más comunes incluyen:
1. Diagnóstico de la situación de igualdad en la empresa
Antes de comenzar a elaborar un plan de igualdad es fundamental realizar un diagnóstico exhaustivo de la situación en materia de igualdad en la empresa. Este diagnóstico debe evaluar aspectos como la brecha salarial entre hombres y mujeres, la distribución de los roles dentro de la empresa, las políticas de contratación, promoción, formación, etc.
2. Establecimiento de objetivos concretos
Una vez realizado el diagnóstico, es importante establecer objetivos claros y medibles en relación con la igualdad. Estos objetivos pueden incluir, por ejemplo, reducir la brecha salarial en un porcentaje determinado o aumentar la representación de mujeres en cargos directivos o de toma de decisión.
3. Diseño de medidas concretas
El siguiente paso es definir las medidas que la empresa adoptará para alcanzar los objetivos establecidos y corregir las deficiencias detectadas. Esto puede incluir la implementación de políticas en materia de igualdad salarial, la promoción de la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, la creación de procedimientos de actuación frente al acoso sexual y por razón de sexo o el diseño de políticas y canales de comunicación inclusivos.
4. Acciones de seguimiento y evaluación
El plan de igualdad debe incluir un sistema de seguimiento y evaluación para garantizar que las medidas adoptadas sean efectivas. Esto implica realizar evaluaciones periódicas y ajustar las medidas si es necesario.
Sanciones por incumplimiento de los planes de igualdad
Las empresas que no cumplan con la obligación de implementar un plan de igualdad pueden enfrentarse a importantes sanciones económicas. La inspección de trabajo es responsable de verificar el cumplimiento de la normativa y, en caso de detectar incumplimientos, puede imponer sanciones.
Además, el incumplimiento de la obligatoriedad del plan de igualdad puede afectar negativamente la reputación de la empresa, lo que a su vez puede influir en su capacidad para atraer y retener talento.
¿Cómo hacer un Plan de Igualdad?
Elaborar un plan de igualdad eficaz requiere de un proceso estructurado y meticuloso. Es fundamental seguir los pasos mencionados anteriormente, desde el diagnóstico inicial hasta el diseño de las medidas concretas y el establecimiento de un sistema de seguimiento y evaluación. Contar con la asesoría de personal experto en igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres o de consultoras especializadas puede ser de gran ayuda para garantizar el éxito de la implementación.
¿Por qué elaborar un Plan de Igualdad con Criteria?
Elaborar un Plan de Igualdad con Criteria te permitirá cumplir con la normativa vigente y garantizar la igualdad efectiva en tu organización. Te ayudamos a realizar un diagnóstico exhaustivo que identifica áreas de mejora y fortalezas en materia de igualdad.
Nuestro enfoque no solo busca cumplir con las obligaciones legales, sino también mejorar el clima laboral, aumentar la satisfacción de tu plantilla y fomentar una cultura inclusiva que beneficia tanto a las personas como a la empresa.
Contáctanos para elaborar tu plan de igualdad.
